Es claro que en el Perú la desigualdad sigue siendo una realidad y que aún no se resuelven diversas brechas por las cuales los grupos minoritarios siguen luchando, así lo expresa la investigadora Mariela Noles Cotito en su último estudio sobre "El Racismo Peruano y su Instrumentalización en las Elecciones Generales 2021".
En el paper plantea lo violento del racismo en el país visibilizado en cómo diversos sectores asumieron la candidatura en progreso de un campesino de ascendencia indígena, que fue tan subestimado en Lima, y a menudo pasado por alto que cuando la encuesta a boca de urna lo anunció como el primer candidato finalista, los medios de comunicación no tenían una foto de su rostro.
Inmediatamente se dieron paso los comentarios racistas contra el candidato y sus votantes, sobre todo en base a su apariencia y supuesta identidad racial. Además, el quechua, una de las lenguas originarias del Perú, fue objeto de permanente discusión al no ser entendida por la mayoría de los peruanos que no son quechuahablantes.
Para la autora del estudio, existe un factor adicional e interesante a considerar. Durante esta elección, ambos candidatos decidieron utilizar y movilizar el miedo y la ansiedad contra un enemigo común percibido: los venezolanos en Perú. Ello movilizó los sentimientos xenófobos que ya estaban en su punto más alto por la creciente inseguridad ciudadana.
Revise aquí el estudio completo: https://intercambio.pe/racismo-peru-elecciones/#.YUeY42skEME.twitter