Recientemente, se vivió un hecho impactante donde un grupo de pobladores indígenas fueron violentados por una empresa minera en la provincia de Apurímac, ubicada al sur del Perú.
Debido a estos hechos, el gobierno peruano ha intervenido junto al Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) para defender los derechos de las personas que viven en pueblos indígenas, ya que en varias ocasiones la palabra de ellos no es escuchada.
Con esto, podemos distinguir las enormes brechas que existen entre el pueblo y la sociedad, la cual siempre busca mantenerse al margen de los problemas que pueda afrontar la población más vulnerable.
Sin embargo, el estado peruano está enfocado en reducir esas brechas a través del reconocimiento de los derechos de los pueblos indígenas, mediante la proporción de recursos que les permita vivir en mejores condiciones de vida para que puedan tener una estabilidad.
Finalmente, se puede entender que las personas que viven en las ciudades y en zonas rurales tienen los mismos derechos en el país, ya que todos pertenecen a un mismo pueblo que debe mantenerse unido para salir adelante como nación.