“Ya comienza la cuenta regresiva
De un año que está por terminar
Y de otro que está por empezar
Jano entre el pasado y el futuro
Es el dios diciembre y es enero
Es un portal para volver a iniciar”
Mi Jouska
Un buen día inicie mi Jouska, ese diálogo interior que a veces no para, en el quiero encontrar respuestas de todo lo que pasa, me pregunto por esas realidades adversas, por los altos niveles de violencia, la incesante discriminación, las injusticias sociales y el maltrato hacia los animales. A veces, lloro y siento desconsuelo, pero aún así no pierdo la esperanza de que pare el sufrimiento. De tanto pensar, invite a Jano el dios romano, el que cierra el año y abre las puertas a uno nuevo. Él, es algo así como un dios del pasado y el futuro.
Con él, y a punto de un año terminar quise dialogar en cuenta regresiva sobre cada momento de la vida y ver en modo progresivo un año nuevo con una paz posible, sin lugar a la violencia, el desamor y la maldita guerra. Compartí mi Jouska con Jano y aunque él es fuerte, no pudo evitar quedarse un poco fragmentado, no es fácil revisar el pasado y quebrarse por sucesos no deseados: asesinatos, masacres, feminicidios, extinción de la naturaleza e indescriptible violencia.
Le conté a Jano mi deseo de reiniciar la vida para que en enero cuando llegue el día, él, abra un portal lleno de esperanza y de cambios…
JANO MIRA EL PASADO
Jano, me acompañó en mi Jouska, y juntos viajamos por el 2020, reflexionamos sobre la violencia que invadió la vida, MÁS (+) de 250 asesinatos de líderes y lideresas, 90 masacres, 569 feminicidios, 230 homicidios de firmantes de la paz, 60.000 denuncios por violencia sexual, 3.700 casos de maltrato animal y como si fuera poco un estallido de crisis sociales en las urbes y en las ruralidades. Un año pandémico que Jano despide a través del solsticio de invierno por donde las almas abandonan los cuerpos y se despiden del pasado.
Este portal regresivo, nos mostró los estragos de la pandemia, que van más allá de una emergencia sanitaria, se trata de la crisis de los valores humanos y el llamado de la naturaleza para que la humanidad detenga su carrera de muerte. Mientras el coronavirus hace lo suyo, otras pandemias invadieron el 2020, contagios de violencia, indiferencia, intolerancia y corrupción. ¡Ojalá que de la misma forma se contagiara el amor, la empatía, la esperanza y la paz!
Junto a Jano, esperamos que llegado el fin de año, el cielo no este reventado con deseos tan superfluos como humanos, dinero, viajes, lujos, carros, no son más que propósitos frívolos de un mundo que necesita más respeto por la VIDA y compromisos con sentidos sociales. Ojalá, el 2020 nos deje lecciones pandémicas de dignidad, justicia social, igualdad y respeto por la naturaleza.
En mi Jouska imagino cada mes del próximo año con la esperanza de apaciguar la violencia y reiniciar la vida sin discriminación, ni apariencias. Mientras despedimos el pasado, guardo silencio y me quedo observando como Jano conjura el futuro, encendimos 12 velas y comimos 12 uvas, cada una representó un Derecho y un propósito de paz.
JANO CONJURA EL FUTURO
Así como Jano es el dios diciembre, también es el dios enero, lo conocemos como Januarius o en inglés January, es responsable de un período de reiniciación, nos da siempre esta opción. Él, abre las puertas del solsticio de verano, y con su ojo futurista nos invita a construir PAZ en los demás meses del año.
Por ello, desde el primer minuto de enero mantendré mi jouska, un clamor porque cese la violencia, la indiferencia y la insoportable salvajía humana. Espero que logremos reiniciar la vida con más amor, generosidad, tolerancia, respeto por la diferencia y libertad. Amalaya, que en un tiempo cercano logremos presenciar una paz posible y que nuestros propósitos de este ciclo que inicia sean no hacer daño a nadie y valorar las cosas más esenciales.
Cada quien desde su lugar tiene la opción de REINICIAR, para ello, es necesario comprender que la paz está en cada persona, en nuestras formas de relacionarnos con nuestro yo, los otros, las otras y el entorno. Jano, también espera que este año sea de emancipación y de lucha contra las injusticias. Y aunque no es fácil darle una vuelta al pasado, solo esperamos que la guerra acabe su reinado.
¡QUE BRILLEN LOS PROPÓSITOS DE PAZ!